Remate bancario
Conocemos una forma más simple y segura de invertir en una proprieda de recuperación bancaria. Queremos ahorrarte tiempo, estrés e incertidumbre al adquirir una propiedad en regularización. Lo que nos hace diferentes es que simplificamos y aceleramos el proceso, garantizándote la entrega del inmueble. Además, te ofrecemos certeza legal y total transparencia en cada paso del camino.
¿QUÉ ES UN REMATE BANCARIO?
Un remate bancario, también conocido como subasta bancaria, es un proceso legal mediante el cual un banco o una entidad financiera vende una propiedad que ha sido puesta en garantía como parte de un préstamo hipotecario. Este proceso ocurre cuando el propietario de la propiedad no ha cumplido con sus obligaciones de pago del préstamo hipotecario, lo que lleva al banco a tomar medidas para recuperar la deuda pendiente.
¿POR QUÉ ES MÁS BARATO COMPRAR UNA SUBASTA BANCARIA?
Cuando obtienes un préstamo hipotecario, ya viene con un seguro (SCV-HF) que protege en diferentes situaciones al emisor del préstamo. Los bancos buscan recuperar el equilibrio al cobrar el deducible de este seguro y luego venden los derechos sobre la propiedad a una empresa compradora. Al adquirir esos derechos, obtienes una propiedad de alto valor comercial a un precio mucho menor. Es una inversión real, legal y atractiva.
¿CÓMO OPERAMOS?
Trabajamos en equipo con bancos y financieras que otorgan préstamos hipotecarios a personas que los solicitan. Estos bancos nos ceden propiedades de sus clientes que tienen deudas impagables debido a pagos insuficientes. Luego, nosotros buscamos compradores para estos inmuebles y gestionamos su venta.
¿QUÉ BENEFICIOS TIENE COMPRAR DE ESTA FORMA?
- Te aseguramos la entrega según el contrato. - Si hay un incumplimiento en el contrato, te reembolsamos la inversión más una compensación. - Transferimos los derechos legales y formalizamos la escritura con un notario público. - Puedes adquirir un patrimonio hasta un 60% por debajo de su valor comercial. - La compra se divide en 2 pagos, evitando una gran desinversión inicial.